En Ecuador no es raro que las familias tengan ayuda en su casa. En Filipinas es muchísimo más común tener más de una persona que te ayude.
Al día siguiente que llegamos a la casa empezaron a visitarme varias mujeres buscando trabajo, aún no estaba lista para esto, pero ya estaba de alguna manera prevenida. No sabía ni qué preguntar ni qué pedir... ni cuánto ofrecer de salario.
El problema es mayor cuando todas las personas parecen simpáticas, son suaves con los niños y están necesitadas de trabajar-.... cómo elegir?
Como aquí estamos mimados, después de elegir a alguna persona, la oficina de seguridad se encarga de revisar si existe historial delictivo, chequear referencias y hacer un examen médico, después de eso pueden otorgar un carnet para la entrada al condominio!
Contraté a prueba a la primera persona que llegó, porque me cayó bien.... después de dos semanas me seguía cayendo bien, pero su comida era terrible, pensaba que era la comida filipina la que no me gustaba.... decidí que no era la persona para nosotros.... nos encanta comer, yo no sé cocinar... necesito que alguien cocine bien!
Puse un letrero y al día siguiente entrevisté a siete personas. SIETE! Pero para esto ya estaba preparada.
Hice una lista de lo que yo esperaba y lo que ofrecía, el salario aún seguía siendo un misterio, porque al buscar por internet y preguntar a una filipina que vive en una gran ciudad.... el salario era 4 veces menos de lo que yo iba a pagar. Mis vecinas no me decían un número exacto!! en fin!
Había una señora que me tenía comprada! ERA COCINERA!!! simpatiquísima, divina! pero muy muy mayor muy muy mayor.... me daría pesar pedirle que limpie algo......
Entonces llegó una señora ni joven ni muy mayor, más seria que las otras personas, amable y me dio confianza.
Ella cocina muy bien, hemos ido juntas al mercado y logra que la comida rinda mucho más.... es buena gente con mis hijos aunque no los tiene que cuidar si alguna vez necesito que se quede con ellos, lo puede hacer! y al parecer eso es muy importante aquí que nuestra vida social noctura sí va a existir... Aún existe el problema del idioma con la Constanza, pero cuando yo no estoy cerca ella acepta que ella se acerque y juegue un rato! Cuando empezamos a hablar de su historia... eso es otra cosa... las historias de migración en este país son largas, penosas y muy similares a las de nuestro país. Ella dejó a sus hijos con madre y su marido discapacitado (polio en la niñez). Trabajó durante muchos años para que ellos puedan ir a la universidad. Regresó hace dos años y sí los hijos terminaron la universidad pero su hija menor no es cercana...
Ella tiene la mirada triste.
:(
ResponderEliminarQué complejo. Desde todo punto de vista. Por un lado, por esa historia personal, tan dolorosa en cualquier caso (así incluso uno aprenda a vivir con ella). Por otro, por lo que revela ese búsqueda desesperada de trabajo. Evidentemente debe ser un país con poca oferta de empleo. Me alegra saber que te sientes tranquila con quien llegó a tu casa y espero que ese encuentro sea bueno para todos. Tener una mano cerca no sólo es útil, puede ser transformador en todos los sentidos.
No dejo de tener el corazón un poquito arrugado con toda esa historia. Aún así, confío en que para ella y para ustedes haya un buen futuro juntos.
Un abrazo fuerte,
A.
Me vino a la mente el primer día que deje a Antoinette con Li, la señora que la cuida cuando voy a trabajar. Ella trabaja con personas que conozco, pero siempre había trabajado limpiando, los únicos niños que había cuidado eran los suyo, porque cuando se caso su suegra ya estaba muerta. Me dio confianza que haya parido sola a sus hijos y los haya criado en la montaña, me dio la sensación de que si a Antoinette le pasaba algo ella sabría que hacer. Pero ahora Antoinette ya no es mas un bebe, y creo que necesitamos alguien que pueda jugar con ella. Pero es tan difícil encontrar a alguien. Yo recojo la casa y cocino, lo hago de labor terapia, me hace bien. Solo necesito a alguien que entretenga a la peque cuando estoy en clase. Acá a las personas que limpian le pagan 2 euros la hora. Pero yo no puedo, me siento desleal conmigo misma, yo le doy la mitad de mi salario, y se que ella lo valora mucho. Pero es que le estoy dejando mi hija, es mas una cuestión de confianza que de dinero. Pero me encantaria que cuando vuelvo de trabajar la comida estuviera hecha, seria un milagro jajaja Un beso enorme!!!
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